martes, 30 de marzo de 2010

Objetivo vs. Subjetivo


Después de definir el concepto de arquitectura, nos dimos cuenta que todos opinábamos cosas distintas sobre cómo definirla y nos dimos cuenta que la definición de arquitectura es un tema subjetivo.
Lo subjetivo, por definición, es considerado en oposición al mundo extremo; perteneciente a nuestro modo de percibir. El subjetivismo es analógico (inexplicable), espontáneo, es decir que viene sin avisar pero que debemos estar en un estado que apoye su llegada; es libre (sin límites) y es arbitrario, es decir que depende de cada uno. Se basa en los recuerdos, gustos, afinidades y en sueños de cada uno y por lo mismo que es una opinión personal, busca crear sus propias leyes.

Al parecer la percepción de arquitectura es individual, pero eso no significa que hacer arquitectura sea libre y subjetivo, pues también hay reglas que debemos seguir (objetivismo).
Para empezar, lo objetivo por definición es algo que existe en la realidad, fuera de uno; es perceptible. Se rige de parámetros, conocimientos, certezas, leyes (reglamento nacional de edificación), mediciones, experiencias (estudio de casos), etc. El objetivismo busca una sola verdad; que todo tenga explicación.

Luego de analizar lo que significa ser subjetivo y objetivo nos damos cuenta que se necesita de ambos para hacer arquitectura. Esta se inclinará hacia una de ella dependiendo de la necesidad o situación.
En conclusión, la arquitectura se divide en dos partes que se complementan. Una es la ciencia (objetivismo) que le da la disciplina y el arte (subjetivismo) que le da la libertad de expresión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario